Estás a punto de obtener algún ingreso extra o un aumento inesperado? Una de mis hijas pidió nuestras oraciones mientras solicitaba un nuevo trabajo, esperando duplicar sus ingresos actuales. Todos los miembros de nuestra familia estaban orando mientras avanzaban en el proceso de selección, a pesar de que ella y su esposo no necesitarían ese ingreso adicional para sobrevivir. Una mañana, mientras oraba por ellos, estaba tan preocupado por los peligros espirituales relacionados con la situación que decidí escribir un simple texto bíblico, sugiriéndoles que lo leyeran durante su adoración familiar. Esperaba que les ayudara a reconocer cómo los ingresos adicionales pueden ser una bendición o una maldición.

 Dos semanas después, luego de leer este texto durante un sermón en Salvador, Brasil, recibí tantas solicitudes para ponerlo a disposición que decidí editarlo y enviarlo para su publicación.

 Si bien es cierto que un mayor ingreso puede ser una bendición de Dios (Deuteronomio 8: 18), también es cierto que puede representar una maldición, especialmente si la vida familiar no está protegida por los principios eternos de Dios. En manos de aquellos que no se han comprometido con el Señor, el enemigo usará un aumento inesperado para seducir a los hijos de Dios, lo que llevará al materialismo, el consumismo y la independencia de Dios, anulando así su influencia (Mateo 13: 22)! ¡Y entonces lo que Dios pretendía que fuera una bendición puede ser usado por su enemigo para convertirse en una maldición (1 Juan 2: 15-17)

Más ingresos pueden ser una bendición si:

 El aumento en el ingreso se obtuvo por medios

honestos, sin comprometer ningún principio de la ley

de Dios a través de mentiras, ventaja ilícita sobre

aquellos que son más débiles, o deshonestidad.

Se planea que el tiempo para la comunión personal con

Dios ocupe el primer lugar del horario de mi día, justo

después de despertarme (Mateo 6: 33).

El tiempo para el culto familiar (mañana y tarde) se

mantendrá como una prioridad máxima, por encima de

cualquier otra preocupación terrenal.

Todavía tengo tiempo para reuniones regulares de

oración o reuniones de grupos pequeños.

El tiempo regular para la misión personal (estudios

bíblicos, evangelismo, grupos pequeños, etc.) sigue

siendo una actividad más importante que mis asignaciones

de trabajo.

Todavía guardo el sábado, de puesta de sol a puesta de

Marcos Faiock Bomfim